¿Qué podemos esperar de la situación en Perú?

Foto: Reuters, tomado de Cubadebate

El 7 de diciembre de 2022, el Congreso peruano destituyó y encarceló al presidente electo Pedro Castillo, acusándolo de haber intentado disolver ese órgano. Dina Boluarte, hasta entonces vicepresidenta, asumió la presidencia del país, lo que provocó una serie de protestas en todo Perú exigiendo la celebración anticipada de elecciones, la reforma constitucional y la liberación de Castillo, entre otras demandas.

La respuesta del gobierno fue declarar el estado de emergencia originalmente durante un mes, pero la medida se ha renovado y sigue vigente sin que se atiendan las demandas de la población.

Las graves denuncias de uso excesivo de la fuerza por parte de las agencias de seguridad y la incapacidad del gobierno de crear un entorno propicio para el diálogo son motivo de gran preocupación a nivel internacional.

¿Cuáles son los antecedentes de lo que acontece hoy en Perú? ¿Qué demandan los manifestantes en Lima y en el resto del país? ¿Quiénes son estos manifestantes, y a qué sectores representan? ¿Si finalmente el Congreso aprueba adelantar las elecciones, cuál es el escenario que se pronostica? ¿Se han identificado posibles candidatos?

Los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes en Perú. Foto: EFE.

La represión oficial a las manifestaciones ha dejado un saldo de más de 60 personas asesinadas, así como decenas de heridos y arrestados. Foto: EFE

Para conversar sobre este tema, en el podcast de Cubadebate hemos invitado al profesor y máster en Ciencias Políticas Pável Alemán, quien es investigador del Centro de Investigaciones de la Política Internacional.

El profesor Alemán recordó que “los estados de emergencia no son nuevos en la realidad política de Perú. De hecho, fueron bastante frecuentes en la primera década de enfrentamiento entre el Estado peruano y los movimientos de carácter insurgente, considerados subversivos.

“Esos estados de emergencia conllevan la limitación del ejercicio de los derechos constitucionales y, en buena medida, solaparon la represión que ejerció el Estado peruano -a través de sus fuerzas armadas y policiales- no solamente contra las personas que militaban en Sendero Luminoso o en el Movimiento Revolucionario Tupac Amaru, sino que además fue ejercida contra todos aquellos grupos o formaciones de izquierda que convivían en la legalidad política peruana, y contra aquel sector de la sociedad al que ellos consideraban que potencialmente podía ser base social de apoyo a la insurgencia armada en aquel entonces”.

“Ahora, en el Perú hay un estado de emergencia y una situación de convulsión social, a partir precisamente de la deposición de Pedro Castillo y su posterior encarcelamiento”, dijo.

“En la sociedad peruana hay un estado latente de protesta social a partir de un conjunto de demandas, entre las más importantes está -a juicio de Alemán- la renuncia de la actual mandataria Dina Boluarte, el llamado a nuevas elecciones generales, y la conformación de una Asamblea Constituyente que dé como fruto una nueva Constitución para el país”.

De acuerdo con el especialista, es importante tener en cuenta que la actual Constitución de Perú surge como resultado del autogolpe que Alberto Fujimori propinó en abril de 1992 al gobierno que él mismo encabezaba, por lo que podría decirse que ese texto constitucional “está en los límites de la ilegitimidad” y “eso ya es un cuestionamiento bastante fuerte” por parte de los manifestantes.

“Actualmente, nos enfrentamos a una circunstancia muy especial, donde hay un Congreso que tiene unas atribuciones que le permiten -en determinado momento- hacer colapsar al Ejecutivo, incluso a la figura del Presidente”.

El profesor Alemán afirmó que “la sociedad peruana se ha movilizado a partir de ese momento y la respuesta de la élite política del Estado –que es una élite muy conservadora- ha sido la represión, y muy desmesurada”.

Existe, según el investigador, mucha evidencia del uso excesivo de la fuerza no solamente por parte de las instituciones policiales del Perú, sino en particular por las propias fuerzas armadas, sobre todo en el sur del país, que es donde se ha concentrado la mayor radicalidad de la protesta política.

“Dados los niveles de ingobernabilidad que se han generado en el Perú, se podría esperar que en algún momento el Congreso ceda y permita entonces que se realicen nuevas elecciones generales”, consideró.

Alemán aseguró también que ya se manejan algunos nombres de posibles candidatos a las elecciones, pero “el sistema político peruano está muy fragmentado” y “están presentes en algunas formaciones orígenes que provienen precisamente de la época del fujimorismo”, lo cual es un elemento a tener en cuenta.

Aseguró que Dina Boluarte “está siendo muy cuestionada por temas de ética política” y que “se avizora un proceso electoral en el que veremos la emergencia de varias mujeres líderes políticas, tanto en el campo de la izquierda como en el de la derecha”. “Nunca antes se había visto ese nivel de participación política de la mujer en Perú”.

“Habrá que ver si emergen propuestas que conduzcan a un nuevo consenso político, a un nuevo contrato social, asentado en una nueva Constitución política, y -si es así- si esta es funcional a una reforma de la política peruana en términos, por ejemplo, que puedan erradicar uno de los males más profundos que tiene el país en estos momentos, que es el tema de la corrupción”.

Conéctese con nosotros, hasta al final. 

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