Oposición venezolana y Gobierno. Un nuevo Plan Golpista
Históricamente en las elecciones presidenciales venezolanas ha existido por cada candidato un Plan de Gobierno para delimitar sus objetivos políticos. Si nos atenemos a la elección de 1998 en la que el presidente Hugo Chávez gana el poder, todos sus adversarios presentaron sus Líneas Programáticas y Objetivos de Política contemplados en un Programa, de manera que la ciudadanía venezolana conoció con tiempo suficiente cuáles eran los propósitos en disputa.
El Plan de Gobierno presentado por cada candidato permitió también, en varias ocasiones, que el presidente Chávez los analizara, lo que le dio la posibilidad de trabajar fuertemente en los primeros años de su gobierno con su adversaria política, Irene Sáez, quien se convirtió en gobernadora del Estado Nueva Esparta, con el apoyo del Movimiento V República y el Polo Patriótico.
De forma similar, actuó el presidente Chávez con otro de sus adversarios políticos en determinado momento, Francisco Arias Cárdenas, a quien más allá de que lo conocía muy bien por ser uno de sus amigos desde la época de militar en activo, aun en medio de diferencias fue el análisis de su entereza y de los objetivos políticos de Arias Cárdenas, lo que incentivó y posibilitó que entre ambos se mantuviera una comunidad de intereses que influyó para que posteriormente Francisco Arias Cárdenas ocupara varios cargos, entre ellos diputado, gobernador y actualmente embajador en México.
Ha sido tónica del ejecutivo venezolano aceptar a la oposición en las filas del gobierno y en la pertenencia activa a los poderes públicos. Ejemplo de ello son Claudio Fermín, tres veces candidato presidencial (diputado varios años y actual candidato), quien ha trabajado desde sus sentimientos de oposición política al lado del gobierno; Enrique Márquez (otro de los actuales candidatos presidenciales) y Roberto Picón, dirigentes del Consejo Nacional Electoral en el 2021, por solo citar algunos.
Para las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024, nueve son los candidatos opositores que adversan al presidente Nicolás Maduro. De ellos, siete aprobaron el Acuerdo de Reconocimiento de Resultados de la Elección Presidencial, y solo dos se negaron a aceptarlo: el anteriormente citado Enrique Márquez, y Edmundo González. Los demás candidatos opositores manifestaron públicamente que el proceso electoral marcha con total normalidad.
Edmundo González es un ex diplomático venezolano, de 74 años de edad. Cuando el presidente Chávez asume el poder se encontraba cumpliendo misión diplomática en el exterior hasta su culminación en los primeros años del 2000. Posteriormente continuó apoyando con su trabajo en la Cancillería.
La candidatura de Edmundo González se produce posteriormente a que María Corina Machado, dirigente opositora de la extrema derecha radical, a pesar de que conocía que por irregularidades legales estaba inhabilitada políticamente, se postuló en las primarias opositoras a inicios del 2024, y obtuvo unos 2 millones de votos.
Ante la continuidad de su inhabilitación, propuso como sustituta a Corina Yoris, docente universitaria carente de trayectoria política. Sobre Corina Yoris la propia oposición se encargó de divulgar dos matrices de opinión: Una, que el gobierno la había inhabilitado ante temores de que pudiese atraer votos de los supuestos apolíticos o indecisos, y otra, que por la propia oposición se le “ajustaron cuentas” porque en una de sus primeras declaraciones cometió la torpeza de anunciar que conversaría con el gobierno para continuar llevando adelante las transformaciones de Venezuela.
Determinados sectores de la oposición reconocen que, para algunos coterráneos extremistas, dichas declaraciones no satisficieron las expectativas que se tenían. Entonces es que María Corina Machado propuso a Edmundo González.
Se conoció de un documento firmado en octubre de 2023 por María Corina Machado, titulado “Land of Grace” (Tierra de Gracia), que ilustra como la privatización será la punta de lanza permanente en caso que Edmundo González gane, pero ni el propio Edmundo ha hecho declaraciones públicas acerca de “Land of Grace”.
Ha quedado este documento en inglés, al parecer, en el imaginario ciudadano en general, incluido el opositor, como una forma más de hacer mantener en el tiempo que de ganar un representante propuesto por María Corina Machado, no solo la privatización excesiva sería contraproducente para la actual Venezuela, sino que también lo serían otros aspectos, como el aumento de la violencia y hasta de la represión política en contra de sus adeptos, tal cual sucedió cuando en el golpe de estado de abril de 2002, se manifestaron elementos extremistas radicales en contra de los que apoyaron al presidente Hugo Chávez.
Lo anterior (del imaginario y sus consecuencias) se refuerza. por solo citar un ejemplo, con el supuesto apoyo que la presidencia de Fedecámaras diera recientemente a una de las últimas declaraciones del presidente Maduro encaminadas a mejorar la economía con la participación masiva de los empresarios venezolanos.
Mientras María Corina Machado recorre las calles desde el cuatro de julio en plena campaña política, buscando, como es lógico, mayor cantidad de seguidores y guiada en todo momento por sus “comanditos”, denominado así su equipo logístico de apoyo, Edmundo se mantiene desde el interior de su casa brindando algunas entrevistas, en las que no ha hecho referencia alguna a su Plan de Gobierno.
Con la salvedad de su insistencia en la necesidad de abatir la inflación mediante cambios y desmedidas privatizaciones; y trabajando su campaña desde las plataformas sociales, con el apoyo de centros pensantes como el Wilson Center, y de representantes de algunas embajadas latinoamericanas radicadas en Caracas, al estilo Trump, Bolsonaro u otros.
La situación actual que caracteriza, en resumen, a la oposición es una mayoría de candidatos participando del actual ciclo de campaña, reconociendo el buen desarrollo del proceso electoral; y dos candidatos que se manifestaron en contra de ese proceso; uno de ellos representante, al aceptar la candidatura propuesta por María Corina, de la extrema derecha radical opositora.
Por parte del Gobierno, desde inicios del 2024 el presidente Nicolás Maduro anunció la agenda de siete transformaciones, las que se sumaron a la iniciativa 1×10, ahora 1x10x7; transformaciones que necesita lograr Venezuela antes del 2030, en el orden económico, social y cultural, y que se continuarán perfeccionando mediante la Unión Cívico Militar y otros Programas como las 39 Grandes Misiones Sociales, en lo que el presidente Maduro ha denominado “el Gobierno en la calle”.
A tales efectos el ejecutivo venezolano creó el Ministerio de la Mujer y Poblaciones vulnerables, y recién celebró el Primer Encuentro Nacional de Comunas, asignándole un presupuesto financiero a los proyectos comunales que desde las propias instancias de bases de esas Comunas deseen priorizar, con la participación y la integración ciudadana; para el 20 de agosto el Ministerio de Comunas debe informar al Gobierno de, cuáles son las prioridades que acordaron para comenzar de inmediato a ejecutar dicho Proyecto social.
La vicepresidenta Delcy Rodríguez anunció la asignación de fondos equivalentes a un millón de dólares destinados al Estado Sucre, afectado por las lluvias e inundaciones provocadas por el Huracán Beryl.
En su campaña, Nicolás Maduro habla de perfeccionar el modelo de convivencia y el goce de derechos humanos, atención a la ecología, renovar el modelo de protección humanista; geopolítica y repolitización; con sostenido énfasis en el aspecto económico para mejorar las condiciones de vida de la población, a tono, entre otros, con el Plan de la Patria, Programa que el presidente Hugo Chávez presentó en el 2012, y que, por razones de peso mayor, no pudiera ejecutar físicamente.
En consonancia con lo expresado por Nicolás Maduro, se cumplirían, además, las Líneas Generales del Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación, mediante el cual se ha pretendido preponderantemente un crecimiento económico sostenido, estabilizar el tipo de cambio y eliminar la volatilidad económica, así como darle prioridad a la mejora y expansión de los servicios básicos como electricidad, telecomunicaciones, agua, gas y otros, otorgando gran importancia a la conformación de nuevos empleos laborales.
Ha insistido Nicolás Maduro en aumentar y diversificar la economía exportadora no petrolera y diversificar también la producción, o sea desarrollar un poderío que permita propulsar la transformación del sistema económico, de ahí el beneplácito de Fedecámaras a tales propósitos, en aras de, independiente de la existencia de diferentes sentimientos políticos, impulsar la Venezuela que necesita todo el continente y hasta el mundo, ante su prestigio en tanto nación con gran cantidad de recursos naturales y de todo tipo, y ante su ascendencia en la geopolítica, por el papel desarrollado por Chávez, Maduro, y sus equipos de Gobierno, en aras de la integración y la concertación latinoamericanas.
Venezuela, declaró Maduro, logra acuerdos con los BRICS para incentivar su economía, y ello, dijo, permitirá mantener los ideales socialistas bolivarianos en pos siempre de la mejor atención a la ciudadanía.
Téngase en cuenta que la economía venezolana crecerá alrededor de hasta un 8% durante 2024, reconocido por organismos internacionales como la CEPAL; el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo; y el FMI. Según han declarado dirigentes gubernamentales venezolanos, la nación sudamericana logró el autoabastecimiento alimentario, cuenta con la posibilidad de producir el 96% de lo consumido en el territorio nacional, luego de que Venezuela tuviera que importar, como consecuencia de sanciones económicas unilaterales, el 85% de la canasta familiar. Venezuela lleva más de trece trimestres con un crecimiento económico en ascenso, logrando la menor inflación de los últimos años, menos de un 30% en sus estándares.
Plan Golpista de la Extrema Derecha Radical
Voceros de la Plataforma de la Unidad Democrática, plataforma opositora que respalda a Edmundo González, han declarado que no reconocerán los resultados emitidos por el Consejo Nacional Electoral, sino que contarán con lo expresado en las Actas de las más de treinta mil mesas electorales, como dando a entender que lo que se recogerá en las Mesas de Votación no se corresponderá con las declaraciones de los rectores del Consejo Nacional Electoral.
Basados en un documento del Wilson Center, Tanque Pensante encargado de difundir determinados intereses estadounidenses, han declarado dichos voceros de la Plataforma de la Unidad Democrática que harán conteos rápidos y declaraciones antes que se pronuncien las autoridades oficiales.
Otro propósito, también incentivado por el Wilson Center, es utilizar resultados parciales de las Encuestadoras, falseando esos resultados no solo para ir adelantando que determinado sector de la oposición ganará sino, más que todo, ir poniendo casi parejo los resultados, creando un clima psicológico de alteración emocional que “caliente” los ánimos, y que una vez decretados oficialmente los resultados, incluso horas antes, incentivar y ejecutar acciones violentas.
Y el propósito final, una vez lograda la violencia, decretado el supuesto fraude o golpe de estado cometido por el Gobierno, pues esos sectores de la extrema derecha radical, buscarán el reconocimiento y el pronunciamiento de la comunidad internacional, intentando crear un episodio al estilo Guaidó, II Parte. Súmese que voceros de la Casa Blanca han dicho que el proceso electoral debe ser más inclusivo, y que la Unión Europea denegó la invitación formulada por el Gobierno venezolano para participar como observadora en el ciclo electoral, reactivando las sanciones económicas contra la totalidad de la ciudadanía venezolana.
El presidente del Comando de Campaña Venezuela Nuestra, Jorge Rodríguez, denunció que la transnacional mediática, CNN, está ayudando a esos sectores extremistas a desconocer los resultados electorales, y que la propia CNN titulará que Nicolás Maduro ganó las elecciones contra todo pronóstico.
Puntualizó Rodríguez que al Plan se suma el dictar supuestos resultados parciales falsos dando a ganar a determinado candidato de la oposición, irlo repitiendo obviando al candidato del gobierno, y que a esa difusión se sumarán cadenas y empresas de la Comunicación como Bloomberg, Reuters, y otras europeas y estadounidenses.
A modo de conclusión
Es de destacar que después de varios años haber adoptado la oposición la estrategia de no presentarse, al menos en gran mayoría, ante la disputa de los comicios presidenciales, en este ciclo ha sido suficientemente representada, y según lo trascendido, el proceso ha conllevado tranquilidad y total armonía.
Por primera vez, al menos en los últimos años, se avizora una oposición tan dividida en su conjunto, siendo representativo que en esta ocasión la división no se centra casi nada en los intereses o disensos internos políticos, sino en la forma de llevar adelante las acciones. La mayoría de esa oposición, con el total respaldo de sus dirigentes aboga porque se efectúen comicios presidenciales, y se reconozcan los resultados que emita el Consejo Nacional Electoral. Han declarado, y con razón, que para algo hay tantos observadores internacionales, y ellos cuentan como todos los Partidos políticos, con fiscalizadores en los colegios y mesas electorales.
De manera que los sectores radicales extremistas se han podido identificar con relativa facilidad. La propia oposición se ha encargado de ello; militantes jóvenes de Acción Democrática han denunciado a otros opositores que intentan crear disturbios y planes agresivos, más de cuatro alcaldes y alcaldesas opositoras han dado su total apoyo al presidente Nicolás Maduro, y dirigentes opositores de la talla de Carlos Prosperi han brindado todo su consenso a favor del Gobierno, no porque sean cobardes o padezcan de decepción política, sino por el bien de toda Venezuela.
En el propio citado imaginario popular está latente aún la quema por sectores extremistas de un joven venezolano, por el solo hecho de vestir una camisa roja, color que políticamente utilizado representa al chavismo; lo peligroso está que, en el caso planteado, acontecido en el municipio caraqueño de Chacao en el 2017, el joven iba de paseo cerca de la intercepción de dos céntricas avenidas, Miranda y Bolívar, o sea no estaba ni en las inmediaciones de manifestación política alguna.
En esta ocasión los designios de los centros pensantes internacionales encargados de la desestabilización se han revertido, la mayoría de la ciudadanía venezolana ha sufrido por igual los embates de las medidas coercitivas unilaterales. Es lo que explica en buena medida la actuación antes descrita de la inmensa mayoría opositora.
En opinión de varios analistas venezolanos, tales como Luz Mely Reyes, directoria de Efecto Cocuyo, iniciativa creada por algunos medios de comunicación, entre ellos “Tal Cual”, con el propósito según dicen de combatir la censura, el hecho de que María Corina haya obtenido solo unos dos millones de votos (y no haya sido capaz de obtener otras fuerzas de coaliciones) casi que imposibilita su triunfo, y mucho más el de cualesquiera de sus candidatos propuestos, sumado a que ella es la que está en la calle pero no es la que aparece reflejada con su foto en el tarjetón electoral.
Si nos atenemos a lo anterior, y al hecho de que Edmundo González no haya presentado propuesta de Plan de Gobierno, pudiera alguien pensar y no tendría por qué ser censurable, que desde la Plataforma Unitaria realmente apostarán el día de las elecciones por la desestabilización.
Finalmente, María Corina Machado ha declarado que invita a todos a votar para que Edmundo sea Presidente, y que atendiendo al Artículo 140 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales, a partir de las 6 de la tarde del 28 de julio todos tienen el derecho de estar atentos al escrutinio que es un acto público. Esperemos que esto último sea solo lo que realmente cumplan sus adeptos, y se eviten así hechos denigrantes.
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