¿Por qué el gobierno de Benjamín Netanyahu asesina a la población palestina de Gaza impunemente?

Los asesinatos masivos del actual gobierno de Israel en la Franja de Gaza, es parte del plan de limpieza étnica que se viene ejecutando en territorios palestinos, antes del nacimiento del Estado judío en 1948.

Con la limpieza étnica, la derecha judía persigue la expulsión de los palestinos de la Franja de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Oriental, por intereses estratégicos (ocupación y seguridad), discriminación religiosa, política, étnica e ideológica.

Con ese fin, los gobiernos en Israel han utilizado: grupos paramilitares, ocupación de territorios, incremento de la colonización, asedios a combatientes palestinos, respuestas militares desproporcionadas, asesinatos selectivos, y masivos como los que hoy están teniendo lugar en la Franja de Gaza.

También las autoridades hebreas han recurrido a los desplazamientos forzosos, hacinamientos y negativas de ayuda humanitarias, con el propósito de causar hambre generalizadas, enfermedades y muertes. Cifras que no se contabilizan por los bombardeos, pero elevan los números de víctimas.

Con tales métodos, Israel busca revertir a su favor el cambio demográfico en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Oriental, para legitimar la ocupación, justificar la colonización y, negar el regreso de los refugiados palestinos. Con todo ello, Tel Aviv busca crear una suerte de “hecho consumado”, para impedir la creación de un futuro Estado Palestino independiente y soberano. 

Con la operación de Hamas el 7 de octubre de 2023, el gobierno de Benjamín Netanyahu encontró, sino provocó, la oportunidad esperada para dar un paso importante en la estrategia de limpieza étnica.

En ese sentido, la derecha judía en Israel calculó que un conjunto de hechos, acontecimientos internos, regional e internacional podrían actuar a su favor y, permitirle libertad para matar palestinos en Gaza con impunidad. Ellos son:

• El apoyo que recibirían de la sociedad judía por el impacto y consecuencias de los acontecimientos del 7 de octubre de 2023,
• la previsible moderación de la Autoridad Nacional Palestina, por el rechazo de la organización al movimiento Hamas,
• la mesura de algunos estados árabes involucrados en procesos negociadores con Israel,
• un complejo escenario regional e internacional determinados por guerras y conflictos,
• la siempre tolerancia de la Unión Europea hacia Israel,
• la dificultad de Rusia para involucrarse de forma directa en un conflicto que, además de larga data, es de pronósticos dilatorios para su solución,
•  el pragmatismo de China,
• la incapacidad de los organismos internacionales para la solución de conflictos,
• la siempre condicionalidad de EE.UU., un aliado en lo militar, político, diplomático y jurídico, al desclasificar documentos en defensa de Israel en la Corte Internacional de Justicia, y,
• una universal cultura de la “costumbre”, de ver a Israel asesinar palestinos, sin que nada suceda.

¿Por qué Israel asesina con impunidad?

Entre los argumentos que Israel esgrimió para asesinar con libertad, está el “derecho que le asiste para defenderse”. La Unión Europea y Estados Unidos, apoyaron en sus inicios la postura de Israel; primero por tradición; segundo, porqueen esta ocasión ciudadanos de esas nacionalidades se cuentan entre las víctimas; y tercero, porque la acción de los integristas islámicos, hirió tanto el honor de los servicios secretos de Israel, como los de EE.UU. los cuales coordinan las operaciones militares estrechamente.

El gobierno de Netanyahu, al asesinar con impunidad, toma en consideración que, para Occidente, el movimiento Hamas califica como terrorista. Esto le concedió una suerte de combatiente contra el terrorismo global,para quienesIrán es un factor de desestabilización en la subregión al apoyar a los grupos integristas.

La derecha israelí, al hacer uso y abuso de su superioridad militar, económica y tecnológicas para masacrar sin piedad, busca sembrar pánico, miedo y caos, que amedrenten a los palestinos de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Oriental. Un mensaje de intimidación, con el objetivo de contener que otros gobiernos u organizaciones participen en la defensa de los gazaties. Se trata de un llamado, mediante las armas a la contención, del que no escapan países de la región.

En su campaña de intimidación en Gaza, la derecha judía, parece utilizar el mismo concepto que emplean para el intercambio de prisioneros. Israel, como práctica, han intercambiado un prisionero por miles de palestinos. Esa misma fórmula parece ponerse en función para asesinar a miles de palestinos, por cada uno de los israelíes muerto el 7 de octubre de 2023.

Esta filosofía discriminatoria y racista de la derecha judía, persigue mostrar la superioridad hebrea en todos sus matices por encima de lo árabe, persas y turcos, entre otras nacionalidades, con presencia o circundantes a la región del Medio Oriente.

Netanyahu, busca eliminar el movimiento integrista islámico de raíz, aniquilar al liderazgo de Hamas, a sus militantes y simpatizantes. Pero si no fuera suficiente, a familiares, amigos, mujeres y niños relacionados o no con la organización quienes, en el futuro, pudieran clamar venganza por la matanza de gazaties.

Lo cierto es, que el gobierno de Netanyahu con los asesinatos masivos, pretende que los palestinos de la Franja culpen a Hamas de sus sufrimientos.

Mensaje comunicacional para asesinar

La derecha judía, en su campaña criminal y con el propósito de movilizar a la ciudadanía, retomó el programa político-ideológico de Hamas que,no reconoce a Israel, ni en su espacio territorial, ni en su contenido poblacional, ni en sus criterios culturales-religiosos.

La estrategia parecer ser que, en el mayor número de ciudadanos judíos, predomine la percepción que el objetivo final de Hamas, como organización, es la destrucción y desaparición de Israel, como Estado-Nación. Esto supondría una suerte de justificación, para matar palestinos sin piedad.

El gabinete de Israel, en su política comunicacional, insiste que Hamas representa una amenaza a la seguridad nacional y, la única forma de protegerse del peligro inminente que representa el movimiento integrista, por su ideología, política y acciones militares, es buscar su total eliminación, en su versión política, moral y existencial.

De modo que, para las mentes más conservadora dentro del Estado judío, el asesinato colectivo, es la única forma de intentar salvar el maltrecho honor nacional de Israel y su ejército.

Para ello, el mensaje comunicacional debe mostrar con crudeza la acción de Hamas. En ese sentido, Isaac Herzog, presidente de Israel, aseguró que su pueblo sigue intentado asimilar lo vivido.

Vivimos cosas que la humanidad no había visto en generaciones, el más alto número de víctimas judías desde el holocausto, atrocidades, barbaridades sádicas, violaciones, decapitaciones, familias enteras quemadas, acciones registradas en videos e imágenes capturadas por los propios terroristas.

La insistencia de Israel, que Hamas utiliza las poblaciones civiles como escudo humano, pretende otorgarle a las Fuerzas de Defensa de Israel, la justificación para atacar infraestructuras civiles y asesinar mujeres, niños y ancianos.

Lo cierto es que, el gobierno de Netanyahu tiene como objetivo, fortalecer el pensamiento de rechazo al islán, a los palestinos y a los iraníes, precisamente ahora, que las posiciones de derecha se imponen como tendencia ideológica y política en el escenario israelí.

Es posible que la radicalización del pensamiento de rechazo a sus contrarios, en la sociedad judía, sea utilizado por el gobierno de derecha para elevar los niveles de fundamentación para legitimar la ocupación en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Oriental, al menos de cara a la política doméstica.

Esto, pudiera representar un obstáculo a cualquier modalidad de negociación que pretenda establecerse sobre la fórmula de dos Estados: Israel y un Estado palestino independiente y soberano.

Las contradicciones intrapalestinas una oportunidad para asesinar

El gobierno de Netanyahu en su incursión militar, evaluó como oportunidad para realizar asesinatos masivos en Gaza, el rechazo de algunos grupos palestinos al movimiento Hamas.

Fatah, y otras organizaciones han enfrentado a Hamas en su versión ideológica, política y militar con el propósito de eliminarla o restarle influencia en la escena palestina.

Hamas discrepa con la Autoridad Palestina en el reconocimiento a Israel. De modo que, algunos palestinos pudieran estar interesados en la eliminación del movimiento integrista de la esfera política, con el objetivo de avanzar en un proceso de paz.

No es casual que el líder de la Autoridad Palestina, en medio de criminales ataques del ejército israelí en Gaza, expresara su disposición para liderear un hipotético proceso de negociación. Esto evidenció a las claras, la desconexión de Fatah con el movimiento Hamas.

Escenario regional e internacional como oportunidad para asesinar

Israel, en su campaña militar, intuyó que la respuesta de países de la región sería moderada, por los acuerdos que Tel Aviv venía alcanzando con los países del Golfo. Pero, además, no resultaría difícil explicarle a cualquier interlocutor, que la intención de los integristas con la acción del 7 de octubre, era minar los esfuerzos negociadores en curso entre Israel y Arabia Saudita. Es decir, boicotear el proceso de paz, al que a todas luces se oponía Teherán.

Lo cierto es que, en tres meses de asesinatos en Gaza, ningún país árabe, ni musulmán, ha cortado los vínculos políticos, diplomáticos y económicos con Israel. 

La respuesta de los Estados Árabes, se ha limitado a realizar declaraciones de condena por la masacre de civiles, lamentaciones por los hechos, propuestas de alto al fuego e inicio de negociaciones. Una postura que algunos calificarían de moderada e insuficiente para frenar la andanada criminal.

Por otro lado, desde el mismo inicio de las incursiones militares de Israel en la Franja de Gaza, la Casa Blanca, ratificó con hechos el apoyo a Israel en lo político, militar, diplomático, jurídico y moral en claro espaldarazo a la prepotencia de Israel.

El mandatario estadunidense, Joe Biden, expresó a medios de prensa: “Le dije a Netanyahu que: Si Estados Unidos experimentara lo que usted está experimentando, nuestra respuesta sería rápida, decisiva y abrumadora”.[1]

Lo llamativo es que, el presidente de la principal potencia militar y, un aliado fundamental de Tel Aviv, se dirigiera en estos términos a un gabinete de guerra, violento por naturaleza, herido por los acontecimientos de la acción de Hamas y deseoso de clamar venganza. Sin dudas, una invitación a la derecha judía para desatar la más cruda violencia en la franja de Gaza.

De igual forma, Estados Unidos con su poder de veto en el Consejo de Seguridad Nacional, impidió en más de una ocasión, la aprobación de resoluciones que invitaban a detener las acciones militares y facilitar la ayuda humanitaria.

Con esta posición, Washington asumía una postura de dejar hacer a Israel que, en medio de los acotamientos sangrientos, se traduce en dejar matar. Esto le concedería a Tel Aviv, licencia internacional para asesinar a gazaties.

La paz de los sepulcros

En las últimas semanas el gobierno de Biden ha comenzado a mostrar un discurso de tono negociador con respecto a la guerra en Gaza. Esta posición pudiera estar relacionada con:

• los temores que el conflicto se expanda en la región,
• conectar con sus aliados árabes,
• limpiar su imagen frente a la comunidad internacional por el respaldo a Israel en su cruzada criminal y,
• no menos importante, ganar respaldo electoral de cara a las elecciones generales en Estados Unidos.

La Casa Blanca parece suponer que alcanzar un alto al fuego en Gaza, regresar a los rehenes estadounidense y, sentar a la mesa de negociaciones a palestinos e israelíes, sería un botín electoral para los demócratas en las elecciones de 2024.

Por su parte, cualquier propuesta de Israel de un alto al fuego, se corresponden con los intereses del gobierno de Benjamín Netanyahu por las siguientes razones:

• La derecha judía pudiera estar considerando que los objetivos político-militares en buena medida han sido cumplido —Algunas fuentes se refieren a que las acciones militares están pasando en estos momentos de los asesinatos masivos a los selectivos,
• es la vía y el momento ideal para negociar el regreso de los rehenes en manos del movimiento integrista, cuestión medular para ganar la aprobación ciudadana,
• intenta maquillar la imagen de Israel ante el mundo,
• pretende complacer la voluntad de sus aliados de Occidente y árabes.

Para Hamas es una tregua necesaria para:

• recomponer la organización y,
•  liberar a miles de combatientes para reiniciar las acciones, cuando las circunstancias lo permitan.

Como quiera que sea, la cuestión palestina vuelve a colocarse en la mira internacional, en esta ocasión bajo un baño de sangren por la matanza de palestinos en Gaza.

Por lo general, las crisis son portadoras de soluciones y catalizadoras de negociaciones para la solución de conflictos. La guerra de Yom Kippur, en 1973, abrió el camino para los acuerdos de Camp David, de la misma forma, que la guerra en el Golfo abrió el camino para los acuerdos de Oslo.

La matanza de palestinos en Gaza pudiera transitar por un derrotero similar. Pero como mismo será larga la guerra en la Franja, al decir primer ministro Benjamín Netanyahu, una solución negociada al conflicto israelo-palestino, parece quedarle un largo camino por recorrer.

[1] Joe Biden, Declaración del presidente Biden sobre los ataques terroristas en Israel. Chile, U.S. Missión. 23-10 https://cl.usembassy.gov/es/declaracion-del-presidente-biden-sobre-los-ataques-terroristas-en-israel